LA ETAPA MÁS BRUTAL DE LA CORDILLERA CANTÁBRICA

Diversas fuentes señalan que la Vuelta a España del año 2009 no pasará por Asturias. Es el agradecimiento de la dirección de la ronda española a los aficionados que se congregaron en las cunetas de los puertos asturianos (sobre todo, el Angliru y San Isidro) este año. Por contra, se van a Flandes a hacer 2 o 3 etapas. Y no es broma. No quieren gastar el Angliru y tampoco quieren trabajar para buscar más terreno “virgen” (también nos van a dejar sin el duro Coto Bello). Allá ellos, pero claro, allá nosotros. Puesto que lo suyo es omitir la opinión de los ciclistas y de los aficionados y hacer caso a ¿qué se yo que nuevos patrocinadores? ahí va otra sugerencia: la etapa más brutal de la Cordillera Cantábrica de menos de 200 kilómetros. Se trata de enlazar 6 puertos de una dureza contrastada.

Comenzaríamos en Avilés (a nivel del mar) para seguir por el alto de la Reigada (una especie de puerto blando de 2ª o demasiado duro de 3ª). Llegamos a Grado para buscar la carretera que nos conducirá al Maravio (un puerto excepcional que fue atravesado por la ronda española allá por el año 2002: tal vez se confundieron, porque no volvieron más). Se trata de una subida dura (con kilómetros enteros al 8 y al 9% y con rampas que llegan al 18%) que nos llevará a San Martín de Teverga donde se entrecruzan dos opciones más que respetables: una, el Puerto Ventana; la otra, el alto de San Lorenzo. Continuamos por esta última y que nos traslada al valle de Somiedo por una carretera  más que dura, durísima. Se trata de 11 kilómetros al 8,1% y con pendientes que alcanzan el 15%. Tras un descenso vertiginoso (con rampas del 20%) llegamos a la Riera donde iniciamos una larga ascensión hasta llegar al alto de Somiedo (habitualmente atravesado por la Vuelta a Asturias). De ahí por tierras de Babia llegamos a Villablino donde iniciaremos la ascensión al quinto puerto de la jornada: Leitariegos (10 kilómetros al 5%). Volvemos a Asturias para explorar un puerto corto e impresionante: el alto de la Capilla de la Ascensión. Una subida de tan solo 7 kilómetros pero con una pendiente media que ronda el 10,6% (recordemos que el Mortirolo tiene un 10,8 y el Angliru, el 10,1%) y rampas que alcanzan un 21%.

En poco menos de 180 kilómetros hemos atravesado 3 puertos de categoría especial, 2 de 1ª categoría y uno de 2ª categoría (nada más salir). Una combinación de puertos largos con otros más explosivos y todos ellos en el incomparable marco de la bella montaña asturiana.